Continua de la Parte II

También Constantino hizo el siguiente anuncio en una carta a todos los que no estuvieron presentes:

"¿Cuando surgió la cuestión relacionada a la fiesta sagrada de la Resurrección [Pascua], se pensó universalmente que sería conveniente que todos deberían celebrar la fiesta en un día; pues qué podría ser más bello y más deseado, que ver esta fiesta por medio de la cual recibimos la esperanza de inmortalidad, celebrada por todos con un acuerdo, y en la misma forma? Fue declarado ser particularmente indigno para ésta, la más santa de todas las fiestas, seguir la costumbre [el cálculo] de los Judíos, que han ensuciado sus manos con el más temible de los criménes, y cuyas mentes fueron cegadas. Al rechazar su costumbre, podríamos transmitir a nuestros descendientes el modo legítimo de celebrar la Resurrección [Pascua], la cual nosotros hemos observado desde el tiempo de la Pasión [crucifixión] del salvador hasta el presente día [según el día de la semana]. Por consiguiente no deberíamos tener nada en común con los Judíos, por que el Salvador nos ha mostrado otro camino: nuestra adoración sigue un más legítimo y más conveniente curso [el orden de los días de la semana]; y consecuentemente; en unánimidad adoptando este modo, nosotros deseamos, hermanos amados, separarnos de la detestable compañía de los Judíos, pues es verdaderamente vergonzoso para nosotros oír hacer alarde que sin su dirección no podríamos celebrar esta fiesta. ¿Cómo pueden ellos estar en lo correcto, --los que, después de la muerte del Salvador, no han sido más guíados por la razón, sino por salvaje violencia, cuando su desilusión les urge? Ellos no poseen la verdad en esta cuestión de la Resurrección [Pascua]; pues, en su ceguera y repugnancia a todas las mejoras, ellos frecuentemente celebran dos Pascuas en el mismo año. No podríamos imitar a aquellos que abiertamente están en error. ¿Cómo, entonces, podríamos seguir a estos Judíos, que están ciertamente en su mayoría cegados por el error? Porque celebrar la Pascua dos veces en el año es totalmente inadmisible. Pero igual si esto no fuera así, sería su deber no manchar sus almas con comunicación con semejante pueblo malvado [los Judíos]. Además, consideren bien, que en semejante asunto importante, y en un tema de tal grande solemnidad, no debe haber división alguna. Nuestro Salvador nos ha dejado sólo un día de fiesta de nuestra redención, eso es decir, de Su santa pasión, y Él deseó [establecer] solamente una Iglesia Católica. Piense, entonces, cuán indecoroso es, que en el mismo día algunos estén ayunando, mientras otros están sentados en un banquete; y que después de la Resurrección, [Pascua] algunos estén recogijándose en fiestas, mientras otros todavía están observando un estricto ayuno. Por esta razón, la Divina Providencia quiere que esta costumbre sea rectificada y regulada en una forma uniforme; y que todos, Yo espero, estarán de acuerdo con este punto. Como, por un lado, es nuestro deber no tener nada en común con los asesinos de nuestro Señor, y como, por otro, la costumbre ahora seguida por las Iglesias del Occidente, del sur, y del Norte, y por algunos de aquellos del Oriente, es la más aceptable, que ha parecido bueno a todos, y he sido garantía para vuestro consentimiento, que vosotros la aceptaréis con gozo, como ésta es seguida en Roma, en África, en toda Italia, Egipto, España, Gales, Bretaña, Libia, y toda Acacia, y en las diócesis de Asia, en Ponto, y Silicia. Deberíais considerar no solamente que el número de Iglesias en estas provincias conforma la mayoría, sino que también es correcto demandar lo que nuestra razón aprueba, y que no deberíamos tener nada en común con los Judíos. Para resumir en unas cuantas palabras: por el juicio unánime de todos, se ha decidido que la fiesta más santa de la Resurrección [Pascua] debe celebrarse en todo lugar en uno y el mismo día, y no es decoroso que en algo tan santo haya alguna división. Como esta es la condición del caso, acepte gozosamente el favor divino, y este mandato verdaderamente divino; pues todo lo que toma lugar en asambleas de los obispos debe ser considerado como procedente de la voluntad de Dios. Haga saber a sus hermanos lo que se ha decretado, celebre este día más santo según el modo prescrito; podemos celebrar así este santo día de la Resurrección [Pascua] al mismo tiempo, si esto se me concede, como deseo, me uniré con vosotros; podremos regocijarnos juntos, viendo que el poder divino ha hecho uso de nuestros instrumentos para destruir los malvados diseños del demonio, y esto causando que fe, paz, y unidad florezca entre nosotros. Que Dios os protega en gracia, mis amados hermanos."

Hefele declara:

"No hallamos más detalles en los hechos. Pero es fácil comprender que los Padres del Concilio tomaron como la base de su decisión el cálculo el cual era en su mayoría generalmente admitido entre Cristianos ortodoxos, es decir, el que regulaba la Pascua según el equinoccio, y el Domingo de Resurrección según la Pascua. Tenemos una carta de Constantino sobre este punto, la cual muestra claramente el pensamiento del Concilio; pues, según esta carta, el Sínodo exige, 1ro, que el día de Resurrección debería ser siempre un Domingo [y por lo tanto decide contra los Cuartodecimanos]; y 2do, que éste nunca debería celebrarse al mismo tiempo que la fiesta de los Judíos. Resulta de esta segunda decisión, que según el Sínodo, si la Pascua caía un Domingo, la Resurrección no iba a celebrarse en ese día, sino una semana más tarde. Y esto por dos razones: [1] Porque la Pascua indica el día de la muerte del Salvador, y que la fiesta de la resurrección debería seguir ese día, y no coincidir con éste; [2] porque en aquellos años cuando la Pascua caía un Domingo, los Cristianos celebraban su Resurrección [Pascua] al mismo tiempo que los Judíos, lo cual era lo que el Sínodo deseaba evitar. La tercera decisión tomada en Nicea [3] prohibir a los Cristianos celebrar la Resurrección dos veces al año [año solar]; eso es para decir, que el equinoccio debería considerarse en todos los cálculos sobre la Resurrección."

Debido a los decretos del Concilio de Nicea las Iglesias del occidente [Católicas] se cambiaron oficialmente de la observancia de la Pascua en el anochecer del 14 de Nisan a la observancia de la Pascua de Resurrección solamente. Confirmado por el primer canon en el Sínodo de Antioquía en el 341.

Las Iglesias Apostólicas de Asía todavía utilizaban la luna para las temporadas. Constantino deseaba que las Iglesias abandonaran esta práctica y utilizarn el calendario solar.

Las Iglesias de Asia [Cuartodecimanos Juanianos] bautizaban en el nombre de Jesús Cristo. Esto le causó a muchos ser catalogados herejes.

El Sínodo de Antioquía en el 341 oficialmente excomulga a los Cuartodecimanos:

"Todos aquellos que se atrevan a actuar contrario a la orden del gran y santo Sínodo, reunido en Nicea en presencia del pío Emperador Constantino, amado de Dios, respecto a la sagrada fiesta de Resurrección [Pascua], serán excomulgados de la Iglesia si ellos obstinadamente persisten en su oposición a esta más excelente decisión. Esto se refiere a la laicidad. Pero si después de esta orden alguno de los oficiales de la Iglesia, obispo, sacerdote, o diácono, aún se atreve a celebrar la fiesta de Resurrección [Pascua] con los Judíos, y seguir su propia voluntad perversa para la ruina del pueblo y la disturbancia de las Iglesias, el santo Sínodo sostiene a tal persona desde ese momento como separado de la Iglesia, porque él no solamente peca para sí, sino que es la causa de ruina y destrucción para muchos; y el Sínodo no sólo despoja a tal persona de su oficio, sino también a todos aquellos que después de su despojamiento presuman sostener comunión con ellos. Las personas despojadas también serán privadas de los honores externos gozados por el santo canon y el sacerdocio."

Estas amenazas no fueron enteramente exitosas. Por lo contrario, aprendemos de Sn. Epifanio que nació y creció en Tierra Santa, que en su tiempo, alrededor del año 400 después de Cristo, habían todavía muchos Cuartodecimanos. En cuanto a su fe, ellos eran ortodoxos, dijo Epifanio. Ellos observan la Pascua Judía y se edifican sobre el pasaje: "Maldito es el que no celebra su Pascua en el 14 de Nisan."

2 Timoteo 4:3-4

3: Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,

4: Y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.

EN EL SÍNODO DE LAODICEA

Data después de Antioquía en el 341 d.C. y antes del 2do Concilio General 381 d.C.

Canon 7:

Se estableció: la persona que no renunciara a la observancia de la Pascua del Señor sería contada un hereje. Aquellos que se retractaran de la Pascua del Señor y vinieran bajo el Credo de Nicea y observaran la Pascua de Resurrección serían ungidos y recibidos entre los misterios Católicos. En este entonces ellos no exigían a aquellos (Novatianos y Fotinianos) que eran bautizados en el nombre de Jesús que fuesen rebautizados. Ellos los consideraban como bautizados en un modo primitivo de bautismo. Pero éstos ya no podían bautizar mas personas en el nombre de Jesús sino que debían utilizar la formula Romana del Padre, Hijo, y Espíritu Santo negando por ello el uso Apóstolico del nombre de Jesús. Los Romanos controlaban a las Iglesias para continuar bautizando en la forma acordada en el Concilio de Nicea "en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo." Los miembros de familia de generaciones siguientes de las Iglesias Apóstolicas fueron de allí en adelante obligados a ser bautizados en los títulos Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Las Iglesias Romanas Occidentales consideraban esto como una revelación proveniente del Concilio de Nicea en el 325 d.C.

Cristianos que seguían a los Apostólicos Cuartodecimanos Juanianos, tenían que renunciar a celebrar la Pascua del Señor en el 14 de Nisan entre las dos tardes. Aunque muchos se retractaron y se cambiaron de la Pascua del Señor para observar el día pagano de la Pascua de Resurrección un número grande se rehusó y nunca se convirtieron en Católicos. Por lo tanto, no todos los Cristianos son Católicos o Protestantes. Muchos grupos Cristianos son descendientes de Iglesias Apostólicas que siempre han rechazado la corrupción Romana de las verdades del Nuevo Testamento.

El Rev. Marvin M. Arnold, en su "Oneness Apostolic History," d.C. 600-700, reporta: "Nota: Durante 626 años [desde 37-42 d.C.] los Celtas Apostólicos celebraron la Pascua el 14 de NISAN. Un Apóstolico del Nombre de Jesús plantó Hechos 2:38 en Glastonbury en el 37-42 d.C. En el 633 éste era la religión dominante en ese entonces [E.T. Thompson, Through The Ages, pp 10-15, 156]."

Vemos de los documentos originales, la Iglesia Católica prohibió el bautismo en el nombre de Jesús y celebrar la Cena de la Pascua del Señor en el 14 de Nisan el cual era el mismo tiempo que los Judíos celebraban su Pascua Egipcia. Cuando la verdadera hora llegó para observar la antigua Pascua, sólo entonces Jesús instituyó la Pascua del Nuevo Testamento en memoria de sí mismo convirtiéndose en nuestro Cordero de Pascua. El celebrar la fiesta de la Pascua del Señor fue predicado y practicado por los Apóstoles, Pablo, Felipe, y demás Cristianos. Todos los apóstoles advirtieron a las Iglesias retener esto y las demás verdades que les habían sido enseñadas hasta que el Señor regresara. Fue Misterio Babilonia la Grande, a través del Catolicismo su hija ramera, que abolió y prohibió en el Concilio de Nicea la Fiesta de la Pascua del Señor en el anochecer del 14 de Nisan (el cordero era sacrificado entre las dos tardes en el 14 pero la pascua era esa noche la cual era en el calendario Judío el 15, pero porque los Romanos contaban hasta medianoche algunos extendían el 14 hasta medianoche. Este es un error fácilmente corregible).

La Iglesia Católica dice que ha recibido una nueva revelación. Que el verso, "todas las veces que lo hiciereis" [1 Co. 11:26] es la auotidad de la Misa en cualquier momento que un sacerdote desee celebrarla. De hecho ellos observa la Cena del Señor con la Misa de la Eucaristía 3 o más veces al día.

Los rituales de las Misas Misterio eran observados en las religiones de Misterio Babilonia desde el tiempo de la Babilonia de Nimrod. Con el fin de instituir estas abominaciones en la Iglesia ellos tuvieron que hacer que las personas creyeran que ellas podían observar la Cena del Señor en cualquier momento que ellas desearan. Los Obispos en Nicea tuvieron que suprimir la Doctrina de los Apostóles con el fin de establecer la Misa de Misterio Babilonia.

Aunque las Iglesias trinitarias hijas [Protestantes] no celebran la Cena del Señor tres veces al día, ellos aún obedecen los decretos del Concilio de Nicea y luchan contra todo aquel que celebra la Pascua del Señor el 14 de Nisan. Algunos han decidido observar la Cena del Señor una vez al mes. Otros celebran la Cena del Señor 2 0 3 veces al año durante matrimonios o avivamientos. Algunos sienten que es mejor observar la Cena del Señor en la noche del 31 de Diciembre, en conmemoración del año viejo que se va y el año nuevo que viene.

Incoscientemente, ellos están celebrando esta Sagrada Observancia en el mes del día de nacimiento del dios Romano Janus; el dios del tiempo, y el abridor de puertas. Una noche y tiempo cuando la orgia, embriagüez, y el comer guisantes de ojos negros y pan de maíz arrasa a los paganos en un espíritu de libertinaje.

No solamente el Cuerpo del Señor no ha sido discernido, sino que muchos observan la superstición Romana de votos de año nuevo que no tienen nada que ver con la Pascua del Señor. El comer guisantes de ojos negros después de su libertinaje, y el ir a la Misa Misterio es puro paganismo. Se nos dice en Apocalipsis 18:4 que salgamos de Babilonia y paremos de participar en sus detestables abominaciones.

Por todo este estudio aprendemos la verdad de las decisiones en el Concilio de Nicea. Los apostóles nos dijeron concerniente a la sinagoga de Satán; Aquellos que prestan atención a los espíritus seductores y doctrinas de demonios; Y aquellos que vendrían para destruir la verdad y convertirla en fábulas. La Iglesia Católica ha decretado que la observancia de la Cena del Señor el 14 de Nisan debe interrumpirse para siempre y nunca practicada nuevamente. El Concilio de Nicea decretó a la Pascua del Señor el 14 de Nisan, como una fábula Judía que sólo herejes y pecadores, rechazando la autoridad de la Iglesia, observan.

El Concilio de Nicea y Papas siguientes van más allá y proclaman que si alguno persiste en observar esta fábula [Pascua], esa persona será excomulgada y se le negará el privilegio de participar en los manjares de la Misa del Misterio Babilónico.

Bueno, obedezcamos el ejemplo establecido por Jesús y sígamos la doctrina de los apostolés y celebremos el 14 de Nisán entre las dos tardes como la Fiesta de la Pascua del Señor que Él ordenó.

Si desobedecemos los decretos de Nicea y regresamos a la Pascua del Señor, estamos quitándonos de la Iglesia Católica, sus credos, y sus decretos de Concilio. Elija obedecer a Dios antes que al hombre, aunque éste sea el Concilio de Nicea, el Papa, una Denominación, Organización, Sacerdote, Maestro, Padre, Madre, Esposo, Esposa. Obedezca a su Señor Jesús Cristo. Obedezca a su Señor y la Doctrina de los Apostóles y celebre la Fiesta de la Pascua el 14 de Nisan entre las dos tardes. No sea más engañado. Jesús cumplió la ley del cordero de Pascua y nosotros debemos celebrar la Pascua Cristiana el 14 de Nisan como él ordenó como un memorial de su muerte y la compra de la Iglesia.

IGLESIAS MODERNAS SIGUEN AL PAPADO
Y OBSERVAN LA PASCUA DEL SEÑOR CUANDO SE LES ANTOJA

Muchas Iglesias y Pastores no disciernen la comleta revelación en la Copa del Señor o Su Cuerpo. Ellos afirman solamente lo que su denominación les enseña o lo que ellos han llegado a creer como una tradición de hombre. La prueba es su celebración de vísperas de año nuevo de este Memorial sagrado. Ellos sustituyen la Pascua del Señor con su propio estilo de Misa o servicio. Algunos se enfadan mucho si usted intenta cambiarles o desafíarles con la verdad. Ellos niegan el honor y gloria que viene con el verdadero recordatorio de la muerte de Cristo en el día apropiado. En lugar de enfocarse en Su muerte, como Jesús dijo que la Pascua tipificaría, ellos se enfocan en la Resurrección como el propósito de la Cena del Señor. Cualquier Estudiante de la Biblia puede ver el error. Sin embargo, aquellos que acompañan al Concilio de Nicea siempre han intentado decir que aquellos que celebran la Pascua del Señor niegan la Resurrección. Esto es falso. Ellos siguen los decretos del Concilio de Nicea en el 325 y celebran la Pascua de Resurrección, rechazando la Pascua del Señor. Aquellos que celebran la Pascua del Señor, celebran ambas su crucifixión y su resurrección.

No había verdadero ritual a seguir en memoria de la resurrección. Todas las costumbres modernas vienen del paganismo. La Pascua de Cristo nunca fue dada para simbolizar la Resurrección. Sin la Pascua, no habría habido Resurrección y consecuentemente no Iglesia. En cambio, Jesús instituyó que la Resurrección sería conmemorada todas las veces que una persona se bautizara. [Ro. 6:4] Porque es en el Bautismo que somos sepultados con Cristo. Es en el Bautismo que somos levantados como Cristo fue resucitado de los muertos. Es mediante el bautismo en agua que los pecados son perdonados por la sangre de Cristo. [Hechos 2:38] Es levantándonos del bautismo que somos hechos nuevas criaturas en Cristo. [Ro. 6:1-6] Es en el Bautismo que tomamos el nombre de Cristo. [Hechos 2:38]. Es en el bautismo que afirmamos nuestra fe que el mismo Jesús que murió en Pascua, se levantó el primer día de la semana para nuestra total redención.

EL SACRIFICIO DIARIO DE LOS CORDEROS

En el Tabernáculo, dos corderos eran sacrificados todos los días por el sacerdote. Un cordero era sacrificado en la mañana. El otro era sacrificado en la tarde. El sumo sacerdote sacrificaba estos corderos primeramente por sus propios pecados, y luego los pecados del pueblo que serían confesados ese día. Estos corderos eran para consolidar todos los pecados confesados del pueblo por el día entero. Estos corderon eran sacrificados por la remisión de aquellos pecados. Los pecados en una base diaria eran llevados hasta el día de la Expiación. En el día de la expiación ellos eran llevaados hacia al Calvario. Cada día y año se mantenía en lo suyo por separado de todos los demás días y años.

Así que si el sacrificio en el templo se detenía por cualquier razón, el pueblo no sería privado de la remisión de pecados la Expiación de Dios ya había aceptado.

Estos dos corderos eran sacrificados en el altar. Su sangre no era llevada al lugar santo. En cambio, un copa de oro llena de vino era vertida sobre el sacrificio. Luego el sacrificio era encendido y ofrecido a Dios.

En esta ofrenda está descrito el sacrificio de Cristo. En ésta está descrita la Comunión. El cordero significaba a Cristo, el pan sin levadura. El vino significaba su sangre la cual fue ofrecida en sacrificio. Aquí dentro Cristo cumple el "Cordero De Dios Que Quita los Pecados del Mundo." [Juan 1:29] Recuerde, el cordero de Egipto no quitó el pecado. El cordero de Egipto no era sacrificado por el perdón de pecados. Solamente los corderos ofrecidos diariamente por sacerdote hacían eso. Ni siquiera en la Expiación un cordero quitaba los pecados del pueblo. Porque no era un cordero sacrificado en el día de la Expiación por una "Cabra." De allí, cuando usted mira al sacrificio diario de corderos por la remisión de pecados, usted ve el cuadro de Cristo. Un cuadro del Cristo que diariamente hace intercesión por nosotros. El Cristo que nos perdona diariamente. De allí, "Dános este día" .... "Perdona nuestra ofensas como nosotros perdonámos a los que nos ofenden."

Así que el Cordero de Dios que diariamente quita los pecados del Mundo es Jesús Cristo. Cuando usted echa un viztazo a la Cena de la Pascua de Cristo tiene una visión momentánea de dos ceremonias. La primera es la conmemoración de la antigua Pascua Judía. La segunda es la Pascua Cristiana en conmemoración del sacrificio de Cristo, el cordero de Dios. Cristo juntó estos dos sacrificios en Su Cena de Pascua. Por lo tanto él se ha convertido en ambos nuestra Pascua y el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo.

En tanto como Cristo fue sacrificado temprano en la mañana al mismo tiempo del sacrificio del cordero de la mañana, y en tanto Cristó murió antes de la oblación de la tarde o sacrificio del cordero de la tarde, Cristo como el cordero de la mañana canceló la necesidad del cordero de la tarde. Así que el cordero de Dios ha reemplazado para siempre todos los sacrificios por su propia muerte en la Cruz.

Hebreos 7:27

27: Que no tiene necesidad cada día [dos corderos], como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo.

Cuando celebramos la Pascua del Señor, llamamos a recordar todas estas cosas maravillosas y hermosas. Entonces ignorar la Pascua es la insulto más alto que usted puede mostrar a la gracia y sacrificio de Cristo. Otras podrán intentar justificarse ignorándola diciendo que Dios tendrá que aceptar sus otros días escogidos, o no tener ninguno en absoluto, pero esto es sacrilegio y medio fogoso. Juan el Bautista no vio a Cristo como el cordero de Pascua, él Lo vio como el cordero que diariamente quitaría los pecados del mundo. [Juan 1:29] El cordero de la Pascua de Egipto habla de liberación de atadura y esclavitud opresiva del gobierno. La Pascua Cristiana habla de liberación de atadura opresiva del gobierno bajo la Ley y esclavitud a una naturaleza de pecado. El cordero Diario de Dios, habla a la remisión de pecados. Ambos el sacrificio diario del cordero y la Pascua Cristiana son juntados en la Cena del Señor. Por esta razón, solamente una pequeña copa de vino con pan sin levadura significa el sacrificio de Cristo como el cordero diario de Dios crucificado en nuestro nombre. Tomar la Comunión reafirma este fe abierta y públicamente.

La Cena del Señor también trae de vuelta al Cristiano el recordatorio de su día del bautismo en agua y primer amor en el Evangelio. Promueve actitudes correctas de perdón, caridad, y comunión. Tomar la Cena del Señor es reafirmar su bautismo y su experiencia del nuevo nacimiento. Si por alguna razón hay débilidad, caída, o causas de excomunión, la Comunión es el lugar para restaurar. Es el lugar para rededicar y reconsagrar la vida de alguien. Participando, usted está reafirmando su creencia que Jesús Cristo es el cordero que quita sus pecados. Un Cristiano que ignora la Comunión de la Pascua del Señor se ha engañado a sí mismo y estará sujeto a muchos problemas y dificultades.

Una mala actitud hacia la Comunión hace a un mofador de Cristo. La ignorancia sobre la Pascua del Señor no es excusa para evitarla. Aquellos que han negado a Cristo para vivir vidas pecaminosas no deben participar de ésta. En la Pascua deben participar creyentes únicamente. Nadie puede quitar las maldiciones que vinen como resultado de ignorar la Pascua del Señor en su apropiado aniversario anual el 14 de Nisan del año Judío.

Muchos no siempre han visto esto, pero cuando busquemos la historia y hallemos que la Iglesia Católica cambió la Pascua en el 325 d.C., conocemos que el Señor quería que su Pascua fuese restaurada. Desde ahora hasta que muramos o que Jesús venga, debemos pensar en honrar el memorial del Señor en el día correcto. Si otros piensan que estamos honrando un día sobre otro, ellos tienen razón. Las Escrituras sobre este tópico simplement dice, "cada uno esté plenamente convencido en su propia mente." [Romanos 14:5] Ya que Yo estoy convencido en mi propia mente, la Primera Iglesia y el Apostól Pablo celebraron esta fiesta anual, estamos en obediencia a la práctica Apostólica y la Palabra de Dios. Ya que la historia registra que la Pascua Cristiana era celebrada por los santos hasta el tiempo del Concilio de Nicea en el 325 d.C. y luego hasta el 626 d.C., Yo estoy convencido que es el día más sagrado del año para la Iglesia. Porque muchos no han restaurado este día más Sagrado del año, estamos sin los beneficios que la primera Iglesia Apostólica disfrutó. Beber la copa de la Comunión es decir, "Estoy honrando la muerte del Señor hasta que él venga."

LA BIBLIA Y USO DEL VINO EN LA PASCUA

Hay un gran esfuerzo para probar el uso del jugo de uvas para el Memorial del Señor. Porque la mayor parte, casi todos los Cristianos utilizan jugo. ¿Pero es verdad que los Judíos usaban jugo de uvas para la Pascua? ¿Es verdad que Jesús usó jugo de uvas para la Pascua y luego para su propio Memorial? ¿Tenían los Judíos una costumbre o práctica de preservar jugo de uva para observancia religiosa porque ellos consideran un pecado alcohólico utilizar vino para la Pascua? ¿Es verdad que beber vino era considerado pecado? Todos estos argumentos son usados para intentar probar y establecer el uso del jugo. Exáminemos las Escrituras y ver si hay alguna luz importante sobre esto que pruebe que el jugo no fermentado no era usado en la Pascua y que el uso no pecaminoso del vino no estaba prohibido.

Melquisedec sacerdote del Dios Altísimo:

Melquisedec sirvió a Abraham pan y vino, en tipo de Comunión. Jesús era sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec.

Gn. 14:18

18: Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino: y él era el sacerdote del Dios altísimo. [Hebreos 6:20]

Algunos piensan que Melquisedec era una manifestación de Dios (lo cual nosotros no sostenemos), pero quienquiera que él fuera, sirvió a Abraham vino. Eso es un hecho que nadie honestamente puede negar. Y, que nosotros sepamos, Abraham lo bebió.

¿Si Jesús Cristo vino según el Orden de Melquisedec y no sirvió a los apostóles "Pan y Vino" en su vida, cómo es entonces que él es sacerdote según el orden de Melquisedec?

VINO UTILIZADO EN EL TABERNÁCULO

El vino era utilzado en los sacrificios del Tabernáculo y no lo manchó. Su cuerpo es ahora el Tabernáculo [templo] de Dios (Éx. 29:40; Lv. 23:13; Nm. 15:5, 7, 10). Los Judíos bebían vino en usos no pecaminosos y esto no fue condenado en ningún lugar en las Escrituras. El pecado era que alguien abusara por embriagüez. Este exceso así como también la glotonería ambos son condenados. ¡Esto no quiere decir que el vino será prohibido más que el comer lo cual es el acto de la glotonería que quiere decir no comas! Para ser escriturales y evitar conducta de pecado en la embriagüez o colocar innecesarias escollos por los cuales un hermano o hermana se ofenda, deberíamos usar vino solamente para Pascua.

Diezmos eran pagados en vino (Dt. 18:4).

Aun cuando algunos sigan intentado hallar alguna forma de tener a Jesús convirtiendo el agua en jugo de uva para la fiesta de bodas en Caná, la realidad permanece que él convirtió el agua en vino verdadero (Juan 2:4).

Juan 4:46

46: Vino, pues, Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y había en Capernaum un oficial del rey, cuyo hijo estaba enfermo.

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