La Iglesia Es El Reino De Dios

Por Cohen G. Reckart

Yo escuchaba a un predicador de radio hablar sobre las pruebas del secreto escape aéreo Pre-Tribulación. Él estaba refiriendo un punto que Dios el Padre se negó permitirle a Dios el Hijo clavar toda la Ley a la Cruz porque esto habría finalizado todo el Pacto del Antiguo Testamento si lo hubiese hecho. Según este ministro, le fue necesario a Dios el Padre salvar la 70ª semana de siete años de la dispensación de la Ley de la Cruz y quitarlos de las santas manos clavadas de Jesús, porque él necesitaba estos siete años después de la era de la Iglesia para salvar Judíos incrédulos.
En su discurso él realizó la declaración que Jesús no fue lo suficientemente capaz de convencer a los Rabinos Fariseos sobre su Reino y así debido a esto el Reino fue pospuesto y los Judíos que no entraron entonces entrarían durante el Milenio. Según este predicador, si suficientes Fariseos hubiesen aceptado a Jesús y su Reino entonces éste habría llegado y no hubiese habido Iglesia y no era de la Iglesia. Pero ya que los Fariseos rechazaron a Jesús, Dios el Padre decidió crear la Iglesia como plan *B* en el intervalo de tiempo entre el rechazo de los Fariseos y el Milenio. Él dijo que la era de la Iglesia era para la salvación de los Gentiles y que si los Fariseos hubiesen aceptado a Jesús no habría habido Iglesia y los Gentiles no habrían tenido esperanza para salvación.
¿Son estas afirmaciones válidas y verdaderas?
Aquí están los puntos expuestos:
1.) Toda la Ley no fue clavada a la Cruz (siete años quitados de la Cruz).
2.) Siete Años de la Ley pospuestos hasta después de la era de la Iglesia.
3.) No suficientes Fariseos creyeron para garantizar continuar con el plan del Reino.
4.) El Reino fue pospuesto.
5.) El Reino no viene hasta el Milenio.
6.) El Reino era para los Judíos solamente.
7.) Los Gentiles no habrían tenido plan de salvación si los Fariseos hubiesen aceptado a Jesús.
Hijos e Hijas de Dios todas estas cosas son falsas. Ellas son parte de los apoyos para mantener la falsa doctrina del dispensacionalismo y el error de la teoría del rapto Pre-Tribulación.
Las Escrituras enfáticamente enseñarán que el Reino vino y no fue pospuesto. Ellas enseñarán que la Iglesia es el Reino. En la Escritura descubriremos las llaves para el Reino y ellas se encuentran en Hechos 2:38. Absolutamente no hay verdad que Jesús pospuso el Reino porque suficientes Fariseos no creyeron. Y es terrible para cualquiera decir que la Ley no fue completa y enteramente abolida y consumada en el Calvario.
La Ley:
¿Fue toda la Ley abolida o casi toda excepto siete años? No hay Escritura o texto en lo absoluto que afirme que siete años de la Ley fueron salvados de la Cruz. Ninguno de los Apóstoles siquiera escuchó tal monstruosidad. No hay absolutamente enseñanza Apostólica que los Judíos durante los supuestos siete años de la tribulación serán salvos por el guardar la restaurada Ley. En realidad, señalando al mismo final de la tribulación en dos textos diferentes Pablo no menciona que aquellos que son condenados fueron condenados porque ellos no estaban guardando la Ley en la segunda venida. ¿Ahora si después que la Iglesia se vaya, la salvación es sólo por guardar la restaurada Ley, entonces por qué son aquellos al final de la tribulación condenados y destruidos porque ellos no creyeron al Evangelio y la Verdad y no más bien destruidos por no guardar la Ley (2 Ts. 1:8; 2:10)?

"En llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesús Cristo."

Hablando del anticristo y las condiciones prevalecientes de la tribulación:

"Y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos."

Estos textos se aplican explícitamente al tiempo de la tribulación y negar esto, es prueba de una máxima apostasía de las Verdades de la Palabra de Dios. ¿Quién negará entonces que cuando el Señor regrese en llama de fuego, será sobre aquellos que al final de la tribulación aún han rechazado el Evangelio y la verdad del plan de salvación del Nuevo Testamento? ¡La idea entonces que el Evangelio termina en el rapto y comienza la Ley, y que nadie será juzgado por rechazar el Evangelio sino que será juzgado por rechazar la Ley, es falsa doctrina! La Ley fue completa y totalmente abolida en el Calvario. Por lo tanto no hay tal cosa de siete años de la tribulación después que la Iglesia se va, tomados de la 70ª semana bajo la Ley, la cual supuestamente fue pospuesta para que la Ley pudiera ser el medio de salvación para Judíos después que la Iglesia sea raptada.

"La ley y los profetas eran HASTA Juan; desde entonces el Reino de Dios es anunciado, y todos se esfuerzan por entrar en él" (Lucas 16:16).

Jesús no conocía de tal doctrina del Reino pospuesto. Él enseñó y esperó realmente que conversos entraran en éste, incluso que los mismos Fariseos se esforzaran y entraran.

"Porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree" (Ro. 10:4).

Hablando de la Ley y del Pacto de Moisés recibido en el Monte Sinaí:

"Y no como Moisés, que ponía un velo sobre su rostro, para que los hijos de Israel no fijaran la vista en el fin de aquello que había de ser abolido" (2 Co. 3:13).

Todo aquel que enseña por medio de escatología u otra forma que hay salvación por la Ley después del Calvario, que hay un tiempo en que Dios volverá a los Judíos que practican la Ley, o que Dios contará el guardar la Ley como salvación por gracia por medio de la fe, se ha convertido en un apostata.
Recordemos que el entero libro de Hebreos fue escrito mientras el templo aún estaba en pie y mientras aún los Fariseos practicaban la Ley. Con eso en mente, no hay verdad en lo absoluto que durante la tribulación el plan de Dios para los Judíos es reconstruir el Templo, colgar una prueba de la rasgadura del velo, reavivar la Ley, ofrecer sacrificios animales, y que un Rabino Fariseo oficie como el Sumo Sacerdote recientemente consagrado. La Ley está completamente abolida y ésta es para siempre una reliquia del pasado. El Nuevo Pacto reemplazó completamente al Antiguo Pacto en el Calvario.
El Reino:
El Reino de Dios también llamado el Reino de los Cielos, comenzó con Adán. La genealogía de Lucas traza la línea de simiente del Reino y la autoridad del trono de Jesús a David y luego a Adán. Es interesante que la palabra *Adán* se pronuncia en Hebreo *Aw-dawn* y la palabra Señor es pronunciada *Aw-done.* Es además interesante que *Aw-done* quiere decir también él que es *Soberano* o el único que rige. No puede haber absolutamente otro significado implicado respecto a Adán excepto que su nombre infiere que él fue el primer Rey de todos los hombres sobre la tierra. Este es el señorío de cada esposo con respecto a su esposa y su familia. La familia de Dios, la simiente piadosa del primer *Aw-done* siempre ha estado en el Reino de Dios. El Reino de Dios ha consistido siempre de aquellos Piadosos sobre la tierra. Y, si nosotros miramos la larga lista de los nombres de aquellos hombres en la genealogía de Lucas podemos ver que si cada uno fue un Rey, y *Aw-done,* entonces hubo en esencia un supervisor Piadoso sobre la tierra en todos los tiempos desde Adán hasta Jesús. Eso es el por qué Sara podía llamar a Abraham *Señor* porque ella sabía que su línea de simiente y herencia le dignificó con esta antigua gloria en la familia del Reino.
Podemos deducir esto de la exégesis de Génesis 1:26 donde a Adán le fue dado el *imperio* y a su simiente piadosa sobre toda la tierra. El imperio es la autoridad soberana para sojuzgar. Hay un reino animal y entonces un reino humano. Un reino consistiría de aquellos que son regidos y gobernados y el único que gobierna por derecho soberano. Un reino sin imperio soberano no es reino. Nada con dos cabezas ha sido nunca el plan de Dios. El anticristo y Cristo no gobiernan y no gobernarán sobre el mismo pueblo. Ellos o están en el reino de las tinieblas o en el Reino de la Luz (Juan 12:46). ¿Si el reino de la oscuridad está aquí ahora, y el Reino de la Luz está aquí ahora (Col. 1:13), cómo entonces puede estar el Reino de Dios pospuesto hasta el Milenio? En 1 Pedro 5:11 encontramos:--A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. El imperio es reinar soberanamente y qué podría describir mejor un reino. Si no hay reino no hay imperio soberano, ...y no hay reinado. ¿Podemos aplicar esto a la Iglesia como el Reino de Dios? ¡Absolutamente! ¡Jesús Gobierna, él es Soberano, él tiene Imperio, y su Reino es eterno. Él no está esperando hasta el Milenio para reinar, halleluyeh él Reina AHORA!
La idea de un reino pospuesto es una fábula Judía. Ésta es una tradición pero no es una verdad. Los Judíos rechazan a la Iglesia como el Reino porque ellos niegan que Jesús era el Mesías. Ellos no tuvieron opción sino fraguar la teoría del reino pospuesto cuando las setenta semanas de Daniel expiraron y ningún Mesías apareció que calificara excepto Jesús. Ya que un Mesías Fariseo no apareció y validó sus errores y las Tradiciones Babilónicas de los Ancianos, ellos tuvieron que decir que había un intervalo de tiempo entre la 69ª y 70ª semana. Así que, cualquier doctrina del reino pospuesto está enraizada en la confesión anticristo que Jesús no era el Mesías venido en carne. ¡Cualquier idea que Jesús pospuso el Reino porque él no pudo alcanzar suficientes Fariseos religiosos que entraran, es triste, lamentable, deprimente!
El Reino fue profetizado en Isaías 9:7 y Daniel 2:44:

"Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo del SEÑOR de los ejércitos hará esto."

"Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre."

Aquí el Reino está unido al trono de David. No dejemos que este punto sea oscurecido por conjetura, opinión, o teoría. Esto es una realidad que donde quiera que el trono de David esté allí encontraremos este Reino. Ese es un punto al interior de la escatología que establece el entero fundamento de la verdad del Nuevo Testamento. Fue esencial que Jesús fuera de la línea de simiente de David para calificar nacer heredero del trono de David. El propósito de la línea de simiente es inequívocamente que Jesús reina en su Reino sobre el trono de David. Eche un vistazo al verso más profundo en las Escrituras que prueba que Jesús es Dios y que el Reino vino cuando él se encarnó en la simiente de David:

"En verdad juró el SEÑOR a David, Y no se retractará de ello: De tu descendencia pondré sobre tu trono" (Salmos 132:11; Hechos 2:30).

Sostenemos y exaltamos la maravillosa historia del nacimiento de este Mesías en las palabras de la hueste angelical:

"Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor" o el Mesías el Rey (Lucas 2:11).

El ángel que visitó a Maria dijo esto:

"Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el SEÑOR Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin" (Lucas 1:32-33).

¡Cuando alguien dice que Jesús no reina ahora me rehuso a creerle! Cuando alguien dice que Jesús no heredó el trono de David cuando nació, le llamo hijo del diablo. Cuando alguien dice que el Reino nunca vino y fue pospuesto les llamo apostata de toda verdad y justicia. Porque todas estas negaciones es lo mismo que ser anticristo. Éstas son las mismas falsas afirmaciones del Fariseísmo y moderno Talmudismo. Y no seguiré a aquellos de quienes Jesús dijo que hacían a sus convertidos dos veces más hijo del infierno.
Por favor siga esto cuidadosamente:
En Marcos 9:1 el Reino iba a venir con Poder durante las vidas de algunos de los que estaban allí en pie.
¿Si el Reino fue pospuesto no habrían hombres y mujeres ancianos de 2,000 años vagando en la tierra?
En Hechos 1:8 el Poder vendría con el Espíritu Santo.
En Hechos 2:1-4 el Espíritu Santo vino en el día de Pentecostés.
Por consiguiente el Reino vino en el día de Pentecostés. Recuerde, éste no es un nuevo Reino, éste es aquel sublime y Santo Reino el cual el trono de David gobierna. Este Santo Reino estuvo en el exilio y un reino apostata del Judaísmo fue establecido sobre la casa de Israel. Esta casa apostata de Jacob fue a Babilonia como prueba que Dios la había expulsado de la tierra Prometida debido a que ellos quebrantaron su Pacto (Jer. 11:10-14). Cuando miramos la genealogía de Lucas vemos la lista de estos ambiguos exiliados Reyes justos del trono de David. Ellos son nombrados. La genealogía se mantuvo. Estos verdaderos Reyes sencillamente no fueron reconocidos por los místicos Babilónicos y ellos fueron de ninguna importancia para los cultos religiosos entonces en el control del pensamiento religioso del pueblo. Un falso sumo sacerdote reinaba en su lugar desde el templo. Pero en la plenitud del tiempo, cuando el Plan de Dios se cumpliera, Jesús de esta línea de simiente nació para que él pudiese establecer nuevamente el trono de David, una nación Santa, un pueblo Justo, y restaurar el Reino no para los Judíos en su totalidad, no, sino más bien para aquellos que creerían que él era el Mesías, el hijo de David, y el Rey y Señor de Israel.
Cuando decimos *Señor* estamos honrando la Majestad de Jesús. Si él no es Rey entonces él no es Señor. Si él es Señor entonces él está reinando ahora como Rey. La casa de Jacob que iba a venir bajo el trono Davídico de Jesús iba a ser la única en y bajo el reinado del Reino. Los que vienen bajo el Trono recibirán el Espíritu Santo como la prueba del nacimiento en el Reino. ¡Y ningún hombre puede decir que Jesús es el Señor sino por el Espíritu Santo! Los Judíos apostatas sin el Espíritu Santo nunca confesarán que él es Señor y Rey de Israel. ¡Eso los hace anticristos por rebeldía! Y ése, Hijos e Hijas de Dios es el mensaje del Evangelio. Esa es la predicación del Reino. Ese es el mensaje del Evangelio del Reino que debemos predicar a todas las naciones. Cualquier Judío que rechaza a Jesús no tiene en lo absoluto esperanza, porque el trono de David está ahora y para siempre en Jesús y allí nunca tendrá fin su Reino. Así que el Reino que vino en el día de Pentecostés era la restauración del trono del Santo Reino de David que estaba bajo la Ley. Sólo que ahora sería gobernado por el Nuevo Pacto el cual el Mesías trajo y estableció en orden.
En Mateo 16:18-19 encontramos pruebas adicionales que el Reino no fue retrasado o pospuesto. En el verso 18 Jesús dijo que él edificaría su Iglesia. La palabra Iglesia aquí es un sustituto del significado Hebreo que quiere decir asamblea o congregación. Y la asamblea o congregación eran términos para describir a Israel en culto y pacto delante del Señor. Porque Jesús al decir que él edificaría su Iglesia, se refirió a que él edificaría su Israel. Y viendo como él reinó como heredero del Trono de David él tenía derecho a escoger su Israel y las clases de vida y prácticas religiosas que ellos manifestarían. Él tenía derecho de excluir de su Reino a cualquiera o cualquier cosa que ofendiera. Lo que nosotros llamamos la Iglesia es entonces el verdadero y único valido Israel de Dios. Ésta es y será por siempre el único Reino de Dios sobre esta tierra. Y esto no se afirma por raza (sangre y carne como los Judíos quieren predicar) sino por GRACIA (la sangre y carne de Jesús como nosotros predicamos).
La Iglesia del verso 18 es el Reino del verso 19. Al final al Apóstol Pedro se le dan las llaves para el Reino. ¡Hijos e Hijas de Dios no tiene en lo absoluto sentido que Pedro tuviera las llaves para un Reino que iba a ser pospuesto! No tiene sentido que Jesús le diga a Pedro que a él le habían sido dadas las llaves para salvación al entrar a la Iglesia del verso 18, si eran las llaves de un Reino que iba a ser pospuesto hasta el Milenio. Y aquellos que enseñan la herejía del Reino pospuesto están con esto destruyendo la entera Iglesia del Nuevo Testamento. ¿Si a Pedro le son dadas las llaves para el Reino, y estas llaves son los tres pasos de fe de Hechos 2:38, entonces debemos concluir que Hechos 2:38 es solamente para el Milenio? Si no, entonces algunos están predicando una doctrina que en la práctica ellos están llamando falsa doctrina. Cualquier Ministro que cita Juan 3:3-5 sobre el nuevo nacimiento para entrar en el Reino y luego tiene el Reino pospuesto hasta el Milenio tiene entonces la experiencia del nacer de nuevo en el Milenio y ésta no está presente en la Iglesia en lo absoluto. Cualquier Ministro que cita Hechos 2:38 como las llaves para el Reino y luego tiene el Reino pospuesto hasta el Milenio ha negado el plan de salvación que ahora utilizamos para la Iglesia.
El Reino está aquí ahora y éste concluirá al final del Milenio. Y debido a eso hay Escrituras del Reino que lo describen en pasado, presente, y futuro. Los dispensacionalistas y Judíos tienen un Reino pospuesto hasta el Milenio. El amilenialista tiene el Reino aquí ahora y ninguno en el Milenio porque ellos no creen en un reinado terrenal de mil años. La Verdad Apostólica es que el Reino ha estado aquí desde Adán, fue restaurado por Jesús para la Iglesia, y se extenderá hasta el final del Milenio.
Los Gentiles:
No hay verdad en lo absoluto a las afirmaciones que la Iglesia es una Novia Gentil. El mal uso de la frase *por amor de su nombre* ha llevado a muchos novatos a una larga vida de teoría de falsa enseñanza. La idea del *amor de su nombre* en este aspecto tiene que ver con el levantar una simiente para continuar el nombre de la familia. Los hijos del *amor de su nombre* iban a ser considerados plenamente los herederos de la línea de simiente de la cual ellos eran por *amor de su nombre.* Los Gentiles por *amor de su nombre* contienen los mismos conceptos. Por lo tanto una vez los Gentiles del *amor de su nombre* tienen todas las dignidades de la línea de simiente de la cual ellos son por *amor de su nombre.*
La Iglesia del Dios Viviente, el pilar y baluarte de la Verdad, fue primero completamente Judía. Éstos donde la casa de Israel que vino bajo el trono de David. Ellos entraron al Reino. Ellos se esforzaron más que los incrédulos y entraron por medio de Hechos 2:38. Los Gentiles fueron injertados en esta asamblea, esta congregación, este grupo de adoradores en el Nuevo Pacto. Ellos entonces reemplazaron a las ramas desgajadas y se convirtieron en hijos de Dios por *amor de su nombre.* Al ser injertados en el Israel de Dios, ellos se convirtieron en adeptos y coherederos de todas las promesas y bendiciones en Abraham. De los dos (Judío y Gentil) fue hecho un nuevo hombre (Israel) en Cristo. Todos los convertidos a este Judaísmo Mesiánico iban a ser considerados conversos con todas las de la ley al Reino del Judaísmo. Ellos no iban a ser considerados más Gentiles o ajenos de los Pactos. Incluso los Fariseos creen que los Gentiles se convierten en Judíos con todas las de la ley:

"Es importante recordar que si vuestro hijo o hija se casa con alguien que se ha convertido al Judaísmo, entonces no hay matrimonio mixto. Un matrimonio mixto quiere decir un matrimonio entre alguien que nace Judío y alguien que no nace Judío que no se ha convertido (http://www.uscj.org/uscj/intmar/parents.html)."

"Recuerde que Abraham y Sara no nacieron Judíos y Rut era la bisabuela del Rey David. Un sincero convertido es un Judío genuino" (Ibid).

Debido a los juegos de mente Católicos y falsos conceptos al interior de la escatología, muchos omiten las obvias realidades de la historia Judía en el tiempo de Jesús. El Judaísmo consistía de varias denominaciones o sectas como las que encontramos al interior de la familia de denominaciones Católico-Protestantes. Así como estos Católicos y Protestantes presentan la afirmación de ser la Cristiandad autentica y ellos son falsos, así las sectas religiosas al interior de la familia del Judaísmo en el tiempo de Cristo afirmaban que ellos eran los Judíos legítimos y el resto eran condenados por su no membresía, prácticas, y o creencias.
Una persona debe primero aceptar y ver todas las demás sectas religiosas del Judaísmo como falsas antes de que ellos puedan asir que cuando el Judaísmo Mesiánico surgió aparte de ellas, este grupo o secta era el correcto y legitimo Israel que practicaba la religión. Así que muchos quieren que los Fariseos y los demás Judíos en general sean el pueblo escogido de Dios debido a carne y sangre, ellos fallan en entender que el nacer de carne y sangre no certificaba la salvación de una persona Judía en lo absoluto. Para ser salvo bajo la Ley se requería más que solo carne y sangre de nacimiento. Cada Israelita tenía la obligación de observar el Pacto de la Ley como éste fue dado primero, no como éste vino a ser controlado, reinterpretado, redactado e interpolado, y fabricado en tradiciones hechas de hombres. Todos éstos eran Judíos apostatas y aunque ellos podían afirmar carne y sangre, ellos eran del diablo. Este es el por qué Jesús pudo decir que ellos eran la simiente de Abraham pero aun eran demonios religiosos. Una persona que es un demonio religioso no posee salvación. El Antiguo Testamento confirmará esto en muchos lugares. Y estas sectas en Israel que eran del diablo que por sus falsas enseñanzas de levadura religiosa abusaban de la Ley como una capa, no eran el Israel de Dios. Jesús, en sus pruebas del autentico Judaísmo Mesiánico señaló a la autoridad de Moisés y los Profetas. Él no confió en la doctrina de los Fariseos o en sus tradiciones Babilónicas de los ancianos en lo absoluto. Hasta que estos puntos sean asidos y aceptados siempre habrá aquellos que intentarán certificar a los demonios religiosos como el pueblo escogido de Dios.
La secta Mesiánica que surgió aparte de estas sectas del diablo, representaba el pequeño rebaño de Israel llamado el remanente (Ro. 11:5). Muchos hijos e hijas de Dios abandonaron las demás sectas y se unieron al Judaísmo Mesiánico. Y este Judaísmo Mesiánico se convirtió en la Iglesia del Nuevo Testamento. La palabra *Cristiano* en Hebreo es *Mesiano.* Los primeros creyentes eran llamados *Mesianos* o pueblo del Mesías. La Iglesia es entonces la continuación Mesiánica del Israel de Dios y los Gentiles son injertados en esa herencia. Nosotros somos ahora uno en Cristo (el Griego para Mesías). Nosotros ya no somos más Gentiles somos Judíos. Nosotros estamos bajo el trono de David y en el Reino. El León de la Tribu de Judá reina sobre esta familia de fe. Él habitó con los primeros Creyentes Mesiánicos como Señor (Rey) y ahora él reina en nosotros como Señor (Rey); y muy pronto él aparecerá y reinará en persona nuevamente con nosotros como Señor (Rey). Esta es la esperanza bienaventurada del segundo advenimiento.
¡El Israel de Dios no es más Judío y Gentiles sino Judíos, Judíos Mesiánicos!
Conclusión:
Las falsas enseñanzas que el Reino fue pospuesto y los errores bajo viga usados para apoyar esa herejía son refutados por la presente. Esto no es escrito para contienda, sino para la gloria del Trono de él que reina.
Reina Rey Jesús, tus Hijos e Hijas te adoran.
Pastor Cohen G. Reckart
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