Apéndice A

No se reconocen mujeres predicadoras entre los Hermanos:

El Nuevo Testamento contiene un testimonio muy claro que nunca hubo idea alguna de mujeres predicadoras. Las mujeres más seguramente fueron conversas y admitidas en la Iglesia. Ellas desarrollaron un grande y notable servicio a sus maridos, sus hijos, sus amigos, al Ministerio, y a la Iglesia. Pero ni una sola de ellas fue ordenada para predicar. ¡Esta es la verdadera luz!

Tributo | Prólogo | Introducción
Antiguo Testamento
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8
Nuevo Testamento
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9 | 10 | 11 | 12 | 13 | 14 | 15 | 16 | 17 | 18 | 19 | 20